Híbridos, microhíbridos, híbridos suaves, híbridos ligeros, híbridos enchufables… la electrificación de los sistemas de propulsión nos ha confrontado con diferentes tecnologías e innumerables nombres durante años. Y aunque un híbrido suave de 48 V no es lo mismo que un híbrido enchufable, muchos consumidores se pierden en la nomenclatura y se aferran al término «híbrido» como si pertenecieran al mismo tema.
Toyota ha abordado este asunto —también un grave problema en relación con las regulaciones ambientales— y ha criticado a las marcas que abusan del término «híbrido»: «Toyota aclarará qué es un sistema híbrido para la eficiencia, qué es un sistema híbrido para el rendimiento y qué es un sistema de asistencia de 48 voltios».
Toyota, el rey de los híbridos durante más de dos décadas
En una entrevista con Drive, Sean Hanley, director de ventas y marketing de Toyota Australia, criticó el uso del término «híbrido» por parte de varias marcas. Cree que marcas como Mazda y Alfa Romeo comercializan sistemas de propulsión en modelos como el CX-60 y el Tonale como «híbridos», aunque técnicamente se encuadran en la definición de híbridos suaves.
Hanley cree que los fabricantes de automóviles tienen la responsabilidad ante sus clientes de aclarar esta distinción. Toyota, pionera en hibridación durante dos décadas, lo hará: «En nuestra opinión, un sistema de asistencia de 48 voltios no constituye un sistema de propulsión híbrido».
«No son híbridos, ni de lejos», concluyó. Los nuevos Toyota Hilux y Land Cruiser, que cuentan con hibridación suave, se denominan «híbridos», pero también «híbridos suaves de 48 V» porque cuentan con un motor y un generador que proporcionan potencia adicional y permiten la recuperación y el almacenamiento de energía en la batería de 48 voltios.
Desde el lanzamiento del primer Prius en 1997, Toyota ha vendido casi 27 millones de vehículos híbridos y según la marca han mantenido la misma cantidad de CO2 fuera del aire que nueve millones de vehículos eléctricos (BEV).
