Si hace unos meses se hacía eco de los planes de uno de los grandes fabricantes automovilísticos de la industria en materia de baterías para modelos ‘cero emisiones’, ahora se sabe que Toyota ha dado un paso más al firmar un importante acuerdo que le permita llevar a cabo sus objetivos. Así, la compañía presidida por Koji Sato ha unido fuerzas con el productor de petróleo japonés Idemitsu Kosan para desarrollar y producir baterías de estado sólido que se utilizarán en los futuros eléctricos de la marca.
Las dos empresas esperan alcanzar la comercialización de este tipo de baterías en 2027-2028 antes de comenzar la producción en masa. Idemitsu dice que ha estado realizando tareas de investigación y desarrollo sobre tecnologías elementales para baterías de estado sólido desde 2001, mientras que Toyota lleva haciendo lo mismo desde 2006. Las dos entidades se están centrando actualmente en electrolitos sólidos de sulfuro que se consideran una buena opción para lograr la alta capacidad y potencia requeridas por un vehículo eléctrico.
Idemitsu ha estado desarrollando sulfuro de litio como material intermedio utilizando subproductos generados durante el refinado del petróleo. La compañía dice que sus esfuerzos y los de Toyota “contribuirán a la neutralidad global de carbono” con las nuevas baterías de estado sólido.
La colaboración entre Toyota e Idemitsu Kosan se dividirá en tres fases. En la primera, las empresas trabajarán para mejorar la calidad, el costo y los plazos de entrega de los electrolitos sólidos de sulfuro, mientras que la segunda implicará la construcción de una gran instalación piloto operada por Idemitsu. Esta comenzará a fabricar el electrolito sólido de sulfuro y obtendrá las tecnologías necesarias para la producción en masa. Luego, Toyota trabajará para garantizar el lanzamiento al mercado de modelos eléctricos con baterías de estado sólido en 2027-28. La tercera fase, por su parte, estudiará el futuro de la producción en masa a gran escala y la comercialización de tecnología de baterías de estado sólido.
“Un problema técnico recurrente ha sido que cargar y descargar repetidamente la batería causa grietas entre los cátodos, los ánodos y los electrolitos sólidos, degradando el rendimiento de la batería. Desde 2013, nuestro socio para resolver este problema ha sido Idemitsu, que fue una de las primeras empresas en llevar a cabo el desarrollo de tecnologías elementales para baterías de estado sólido. Una de esas tecnologías elementales es un electrolito sólido altamente flexible, adhesivo y resistente a las grietas. A través de repetidas pruebas y errores y combinando las tecnologías de materiales de ambas empresas, hemos podido desarrollar un material resistente a las grietas que demuestra un alto rendimiento”, señaló Koji Sato.